¿Aguantar más? Mantén la calma.
¿Quieres aguantar más en la cama? Prueba con un lazo de erección. Y también recuerda algo importante.
Son pocos los hombres que no desearían durar más y ser considerados como un súper macho que siempre tiene el control total de la acción. A menudo, todo lo que se necesita es algo pequeño que puede que ni siquiera sepan que existe.
Si sigues leyendo, podrás saber por qué probarlo y por qué el aguante no es todo.
Cuando el lazo se aprieta
El punto de no retorno puede ser dulce, pero también estresante. La sensación de fracaso y de no poder hacer gran cosa, por no hablar de llevar a tu pareja al orgasmo, no contribuye a tu autoestima ni a tu buen humor. Las experiencias repetidas de este tipo pueden llevar a un círculo vicioso. No sólo es posible que el aguante no mejore con el tiempo, sino que el estrés también puede provocar la pérdida de la erección. Y eso es exactamente lo que no quieres.
La solución puede ser sorprendentemente simple: un lazo o un anillo de erección ajustable. Se trata de un pequeño juguete erótico que permite apretar el pene en la raíz o también el pene junto con el escroto y los testículos. Su ventaja sobre el anillo de erección es que puedes determinar la fuerza de agarre. No estás limitado ni por el tamaño ni por la elasticidad del material.
Además, en el caso de un lazo doble, puedes decidir si utilizas los dos lazos en un mismo lugar o si sujetas el pene y las pelotas por separado. El lazo de erección cumple la misma función que el anillo de erección, impide que la sangre salga del pene, lo que logra una erección más firme. Y al mismo tiempo, no es tan fácil alcanzar el orgasmo.
Lo es importante percibir cómo reacciona el cuerpo. Si sientes molestias o el color del pene cambia a un tono azulado, debes aflojar el lazo. Si esto no ocurre, el lazo puede disfrutarse hasta 30 o 40 minutos. Lo que es bastante más que lo que la mayoría de las mujeres necesitan para alcanzar el orgasmo.
¿Tienes miedo de que con un anillo o un lazo de erección te consideren incapaz? Deja la vanidad a un lado. El hecho de que utilices un juguete erótico no demuestra tu incompetencia o debilidad, sino que te preocupas por tu pareja, y que estás buscando una manera de solucionar la falta de aguante y la eyaculación precoz. Una pareja cariñosa y receptiva siempre lo agradecerá.
Débil no es el que busca ayuda, sino el que finge que no la necesita, aunque se demuestre que tiene problemas.
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El aguante no es todo
No es sólo el aguante lo que hace a un gran amante. Las mujeres son mucho más variables y complejas en sus experiencias y en las formas en que pueden ser llevadas al éxtasis amoroso. No tengas miedo de usar la boca, los dedos y juguetes eróticos. Pregúntales qué les hace sentir bien y aprende de sus reacciones qué camino tomar y cómo. La penetración del pene puede quedar entonces como la cereza en la torta al final.
Una mujer nunca cambiará a un amante sensible y cariñoso por un idiota descerebrado. Escuchar, percibir, discernir, elaborar estrategias y tácticas, y luego utilizar ambas correctamente: ésta es la clave para convertirse en amantes perfectos. ¿Y el aguante? No es tan importante, de veras.
Autor: Christian Fischer
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